Part 2.9
Section § 10900
Section § 10901
Esta sección reconoce la importancia de la agricultura en California y reconoce que los recursos hídricos del estado son tanto limitados como renovables. Destaca los esfuerzos ya realizados por la agricultura para mejorar la eficiencia del uso del agua y sugiere que la adopción de más prácticas de gestión del agua podría aumentar aún más la eficiencia. Se destaca el papel de los proveedores de agua agrícola en la implementación de estas prácticas y en la asistencia a los usuarios para optimizar el uso del agua.
Section § 10902
Esta sección define los términos utilizados en el contexto del uso del agua agrícola en California.
Un 'proveedor de agua agrícola' es cualquier entidad, pública o privada, que suministra agua específicamente para la agricultura. Las 'prácticas eficientes de gestión del agua' son programas que buscan mejorar de manera razonable cómo los agricultores reciben y utilizan el agua, asegurando que estas prácticas sean económicamente viables. La 'conservación del agua' implica reducir la pérdida de agua mediante diversos métodos, como mejorar la tecnología o implementar nuevas técnicas, para satisfacer mejor las demandas de agua agrícola existentes sin desperdicio innecesario.
Section § 10903
Esta ley exige la creación de un comité asesor para supervisar las prácticas de gestión del agua en California. El comité incluye miembros de diversos sectores como la agricultura, la educación y grupos de interés público. El objetivo es revisar periódicamente y determinar prácticas efectivas de conservación del agua. El departamento puede realizar estudios para evaluar la eficacia de estas prácticas, pero esto no modificará ningún derecho de agua existente. La aportación del comité es importante para estas revisiones y estudios.
Section § 10904
Esta sección de la ley establece que el departamento debe ayudar a los proveedores de agua agrícolas a usar el agua de manera más eficiente. Lo hacen ofreciendo consultoría técnica y capacitación para ayudar a los agricultores a determinar cuánta agua necesitan realmente, mejorar la forma en que se aplica el agua y decidir los mejores momentos y cantidades para el riego. El objetivo es mejorar la eficiencia general del uso del agua.